La escuela está abierta, profesores y estudiantes vamos trazando un camino. Como siempre, esta página es un medio para compartir con la comunidad lo que se hace, la magia de las palabras, las imágenes, las ilustraciones, la creación.

El hoy es distinto, pero la propuesta se enciende. Los invitamos a compartir el trabajo de nuestros estudiantes en este 2020.

Estudiantes de Segundo Año C reflexionan sobre la narración, esa capacidad humana de crear mundos posibles, luego elaboran historias sobre una secuencia narrativa muy simple. Acompañan las fotografías de la artista y alumna de sexto Comunicación, Nazarena Buzurro.

El dibujo

Estaba otra tarde sentada en la ventana, dibujando mientras que la gente en la calle atolondrada, luchaba por dejar el transito atrás y llegar a sus trabajos, a su casa o a la escuela.

De repente una ráfaga de viento voló todos mis papeles hacia la vereda de enfrente, bajé corriendo las escaleras y salí a la calle. Estaba a punto de agarrar el dibujo cuando otra ráfaga de viento lo alejó nuevamente y seguí el papel hacia la plaza central de la ciudad. Distraída y mirando hacia todos lados para no perder de vista el papel, olvidé lo concurrida que es la plaza, así que evidentemente me choqué con alguien. Recordaba haberlo visto alguna vez en la escuela, pero no sabía su nombre, probablemente porque era de un curso mayor. Al chocarnos los dos caímos hacia atrás por el impulso y la rapidez a la que íbamos, me levanté rápidamente e intenté ayudarlo, en ese instante me di cuenta de lo bello que era, parecía tallada por los dioses cada centímetro de su cara.

Le tomé la mano para ayudarlo a levantarse y le pedí disculpas, me dijo que no había problema y me ofreció invitarme a un café al día siguiente, acepté e intercambios números.

Al volver a casa recordé que no había encontrado mi dibujo, pero ya no importaba, era tarde. Tal vez algún día logre conseguir con detalle y perfección rehacer el dibujo, pero estoy segura de que nunca hubiera tenido otra oportunidad de hablarle.